top of page

¿Cómo se puede tener una sexualidad responsable?

10 ejemplos de sexualidad responsable en la adolescencia

Así como nos preocupamos por mantener unos buenos hábitos de salud física y mental, y nos esforzamos por hacer actividad física, comer saludablemente, gestionar nuestras emociones y cultivar relaciones armónicas, es igual de importante que entendamos que vivir una sexualidad responsable forma parte de nuestro desarrollo integral como seres humanos y aprendamos a disfrutar de este derecho de manera consciente.  


A la sexualidad le debemos dar la misma importancia que a otras actividades que hacen parte de nuestra cotidianidad, como comer, ejercitarnos, dormir, bañarnos, estudiar, leer, entre muchas otras. Por eso es clave que desde edades tempranas les inculquemos a lxs niñxs y adolescentes hábitos y conductas que les permitan vivir una sexualidad sana y responsable y tomar decisiones sobre su cuerpo con autonomía y libertad. 


¿Qué es la sexualidad responsable?

La sexualidad responsable consiste en poder disfrutar de este derecho que tenemos todos los seres humanos a decidir sobre nuestro cuerpo y ejercer nuestra sexualidad con plenitud. Para ello tenemos la responsabilidad y el deber de estar informados acerca de las consecuencias que tienen nuestros actos, sobre nuestra corporalidad y la de los demás. 


En ese entendimiento es clave comprender que la sexualidad hace parte de nuestra evolución como seres humanos, desde la infancia, pasando por la adolescencia y llegando a la adultez. Esta se manifiesta en todas las etapas de la vida y no solo tiene implicaciones individuales, también tiene efectos sobre la manera cómo nos relacionamos con las demás personas.  

  

¿Por qué hablar de sexualidad responsable?

El sexo ha sido por generaciones un tema tabú en muchos ámbitos de la sociedad y parece que estuviera prohibido para algunas personas, que prefieren mantenerlo en sigilo antes que propiciar conversaciones asertivas que promuevan el derecho a vivir una sexualidad sana y responsable, en especial en lxs jóvenes. 


Importancia de la sexualidad responsable

Es necesario que desde distintas instancias, como escuelas, universidades, autoridades de gobierno, pero de manera muy enfática en las familias, se entienda la importancia de abrir espacios en los que se promueva con lxs jóvenes un diálogo abierto, franco y sincero acerca de los derechos sexuales y la manera cómo se puede ejercer un sexo responsable y seguro, protegiéndose, reconociendo y aceptando las consecuencias de las decisiones que se tomen, con sus implicaciones. 


Características de una sexualidad responsable

Hay muchas maneras de ejercer este derecho y de vivir la sexualidad responsable en el plano personal, familiar y social. Las personas que la ejercen se caracterizan de la siguiente manera:


  1. Autonomía

  2. Libertad

  3. Madurez

  4. Honestidad

  5. Respeto

  6. Consentimiento

  7. Protección

  8. Búsqueda del placer

  9. Bienestar

  10. Información


Consejos para abordar la sexualidad responsable

El cuidado de la salud sexual debe ser una prioridad para todos y es mejor si comenzamos a edades tempranas, antes de que comencemos con una vida sexual activa. 


Existen diversas maneras de abordar la sexualidad responsable:


Informarnos

Mientras más información tengamos acerca de la sexualidad, de nuestros derechos, enfermedades y riesgos, mejores decisiones tomaremos. Leer, consultar y preguntar. Informarse con fuentes que sean de confianza.


Sexualidad responsable: no hay que tenerle miedo a consultar ni preguntar 

Padres e hijos deben hablar del tema sin tapujos, es preferible que ellos aprendan de estos temas en casa que se enteren por otras fuentes que no sean confiables. Hay que permitirles que se sientan cómodos al hacerlo. 


Protegerse 

Una de las bases del sexo seguro es saber cuidarse y cuidar a lxs demás. Usar métodos preventivos para evitar la transmisión de una enfermedad sexual, y hacerse estudios de laboratorios periódicamente para confirmar o descartar estas enfermedades, son prácticas muy recomendadas de las cuales las parejas deben ser muy conscientes y hacerlo con regularidad para evitar contraer enfermedades que puedan afectar la salud de ambos.


Controlar las emociones

Tenemos que aprender a reconocerlas y manejarlas, esto nos ayudará a tomar decisiones responsables y a prevenir consecuencias no deseadas.


Valoremos nuestro cuerpo

Es nuestro territorio y sobre él nadie decide, excepto nosotros mismos. 


Respetemos las decisiones de lxs demás sobre su cuerpo

Así como nadie decide sobre tus derechos sexuales, tampoco tenemos por qué imponerles nada a otras personas.


Sexualidad responsable: no hay nada de malo si decidimos esperar

Nadie nos debe decir cuándo es el momento adecuado para ejercer nuestra sexualidad. Cada uno es libre de elegir cuándo, cómo y con quién.


No nos comparemos con lxs demás

Si los amigos han tenido relaciones sexuales antes, o al contrario, lo hicimos primero, cada cual vive su sexualidad como prefiera. 


Conozcamos los métodos anticonceptivos que tenemos a disposición

Consultemos las características de cada uno, sus beneficios, efectos y consecuencias. Así tendremos la información necesaria para elegir el que mejor se adapte a nuestras necesidades. 


Preguntémonos si estamos preparados para ejercer una sexualidad responsable

Si aún no hemos tenido nuestro primer encuentro sexual, analicemos todas las consecuencias que puedan tener nuestros actos antes de tomar cualquier decisión. 


Lo más importante para vivir una sexualidad sana y responsable es ser conscientes de las decisiones y de que nuestro cuerpo es nuestro territorio y nadie tiene derecho a elegir por otro. 


Si necesitas conversar con alguien sobre el tema, busca ayuda de un profesional en salud sexual que te entregue la información indicada. 


En Sexualidad Zana te ayudamos a cuidar tu salud sexual y reproductiva. Haz tu consulta y ejerce tus derechos con responsabilidad y consciencia. 


Referencias bibliográficas




bottom of page